Playa Juan de Dios-Palitoebrea-La Sierpe

PNN Uramba-Bahía Málaga
Lancha a Bahía Málaga y La Sierpe

Pese a que llovió toda la noche y amaneció en las mismas, a las 11:00 am decidimos embarcarnos en lancha para adentrarnos en Bahía Málaga, una Reserva Natural ubicada en el Pacífico Colombiano muy cerca a Buenaventura.

Lugar al que es preferible ir en verano ya que es selvático, muy húmedo y está ubicado en la segunda zona más lluviosa del mundo

Aún con algo de lluvia -pues nosotros fuimos en pleno invierno (noviembre)-; partimos de Playa Juan de Dios. Nos fuimos bordeando la costa lo que nos dio la posibilidad de pasar cerca a los lugares más representativos.

Pasamos por playa Chucheros, La Loma y una punta llamada Palitoebrea en donde hay como un desbaratado embarcadero. Al frente veíamos, a lo lejos, la Base Militar que custodia ésta zona.

Más allá llegamos a Puerta del Mono en donde se entra a la Bahía de Málaga ésa que, gracias a ser reserva, está muy bien conservada, sus aguas son más claras y la vegetación está intacta.

Ésta Bahía hace parte del PNN Uramba que también conserva los esteros de manglares y una serie de formaciones rocosas que le dan un toque especial a ésta zona.

Pero además del acogedor paisaje, hay allí lo que ellos llaman La Sierpe, tres cascadas de agua dulce que se desprenden de la montaña y caen al mar ofreciendo una fusión de paisajes sencillamente alucinante.

Antes de ir a conocerlas, entramos al caserío que tiene el mismo nombre o sea La Sierpe sitio del cual se ve una bella vista sobre la Bahía.

Luego continuamos a La Sierpe cuya historia habla de la existencia de una culebra de 7 cabezas que, para no devorar todo a su paso; salió al mar de cola y a su paso formó 3 caídas de agua dulce al mar.

Ante tan majestuoso panorama aprovechamos y nos zambullimos en éstas aguas.

A eso de las 3pm llegamos de nuevo a Juan de Dios y tras un baño nos deleitamos con las historias macondianas que los lugareños nos contaron.

Una de ellas se refirió a la existencia de murciélagos “chupasangre” que tras morderlo a uno se le orina encima dejando un olor peculiar para seguirlo a donde vaya con el fin de continuar succionándole la sangre. Nos dijeron que a un señor lo siguió por doquier y terminó matándolo.

Otra historia contó sobre la existencia de una rama que pertenece a una planta conocida popularmente como “Ya te ví” Dicen que si te roza la piel y te corta y no se mata la mata, la herida sigue creciendo como si fuera una rama y la única forma de detener éste proceso es devolverse a matar la mata que te cortó.

Y por último nos hablaron del fenómeno “mal dormido” en la que individuos o parejas infieles que hagan el amor son más propensas a ser mordidas por culebras. Contaron el caso de una pareja infiel que estaba en un motel a la cual le tiraron un par de culebras a la pieza que terminaron por matar a dicha pareja.

Cierto o no el Pacífico Colombiano está lleno de historias y encantos por todos los lados.